Fotografía

Proyectos Personales

«Ecos de passions prohibides: Una immersió a ‘La casa de Bernarda Alba'»

«Ecos de passions prohibides: Una immersió a ‘La casa de Bernarda Alba'» es el título de una obra multidisciplinaria con un fuerte componente visual que, combinando la fotografía y la poesía, conduce al público por una reinterpretación de la obra teatral de Federico García Lorca, tan vigente casi un siglo después de su confección.

El proyecto nace de mi fascinación por el universo de Federico Garcia Lorca. Un sentimiento que surgió durante mi adolescencia, cuando leí por primera vez ‘La casa de Bernarda Alba’. Esta lectura me atrapó por su sensibilidad y estilo y me hizo conectar profundamente con las voces de las mujeres de una época que, a su manera, ya estaban luchando por su empoderamiento y libertad. Este sentimiento y vínculo con la obra y sus personajes, posiblemente, tenga relación con mi entorno familiar, dónde la figura de la mujer ha estado muy presente y ha tenido un gran peso, con una familia extensa y un núcleo familiar conformado -en su mayoría- por mujeres, que me han criado y han sido mis referentes.

Para la muestra, se han recreado algunas de las escenas de la obra lorquiana en el interior del emblemático conjunto histórico del Castell del Remei con siete actrices y modelos caracterizadas para la ocasión. Precisamente, en este mismo entorno es dónde dará inicio la exposición itinerante, al tratarse del lugar de nacimiento del proyecto fotográfico. En esta exposición, los asistentes podrán recorrer -física y metafóricamente- los espacios interiores de la casa de Bernarda, guiándose por los haikus del poeta Eduard Batlle (Premio Jordi Pàmias 2015 y Premio Manuel Rodríguez Martínez – Ciutat d’Alcoi 2018), que acompañarán las fotografías dejando espacio para la figuración del espectador.

Metanoia

Los seres humanos, gregarios por naturaleza, nos hemos agrupado para sobrevivir y, en todo el mundo, hemos levantado ciudades enteras para vivir en sociedad y proveernos de múltiples bienes y servicios, configurando espacios muy diversos. Con el tiempo, las ciudades han crecido y se han transformado, mientras que también lo ha hecho la sociedad, hasta el punto que nuestra cotidianidad actual difiere mucho de la de nuestros ancestros, cada vez más desdibujada.

Un año después de estallar la pandemia, la sociedad se ha visto forzada a vivir de una manera inimaginable antes y arrastra, a lo largo de los últimos meses, los efectos -físicos, psicológicos, económicos- de la crisis socio-sanitaria.

¿Qué pasaría si pudiéramos viajar en el tiempo? ¿Saber cómo viviremos en el futuro nos haría cambiar la percepción que tenemos sobre el estilo de vida actual, la mentalidad y los valores que nos conforman como sociedad?

Estas son algunas de las preguntas planteadas a raíz de un viaje personal físico, imaginario y emocional, que se inicia con una infancia vivida en un entorno rural y un ritmo pausado, para girar después, en la edad adulta, hacia el frenesí de una gran ciudad, hoy encarada a retos globales sin precedentes.

¿Era esto, el futuro?

Astulzí

Este proyecto fotográfico nace con la intención de rendir homenaje a mis ancestros y a la tierra que ha visto crecer a 5 generaciones de mi familia.

Mis antepasados, que tanto amaban la tierra y la cuidaban de forma amable y respetuosa, se veían recompensados cada primavera con una gran floración de sus árboles. Los árboles frutales les generaban una buena cosecha, siendo la fuente de ingresos principal de la familia para todo el año (pues la fruta era comercializada a los mercados rurales de Lleida y en otras localidades de España).

La historia empieza de la mano de mis tatarabuelos. Compraron la torre de Can Mascaró, ubicada en la huerta de Lleida, dónde se trasladaron a vivir y a trabajar la tierra. Con el tiempo, la familia se unió con dos familias más de Lleida, para ir a California en busca de semillas de manzanos y perales. Una vez en sus manos, las sembraron en sus tierras, dónde vieron nacer y crecer a sus arboles frutales, cuidándolos con sumo cariño.

La torre familiar vió crecer a los árboles frutales que la rodeaban, pero también a la familia. En ella llegaron a vivir hasta 4 generaciones (desde mis tatarabuelos hasta mi madre y mis tíos/as). La quinta generación no llegamos a vivir en ella, pero una parte de nosotros sí pudimos ir en alguna ocasión (aunque algunos demasiado pequeños/as para recordarla) antes de que la torre fuera vendida. Desde entonces, la torre está inhabitada.

Muchos años después, mi madre, mi hermana y yo fuimos a la torre para fotografiarla. Volviendo a nuestras raíces. Reencontrándonos con nuestra historia.

Fotomontajes para la revista de Fires i Festes

Fotomontajes realizados para el programa de Fires i Festes de Sant Sadurní d’Anoia. Este programa, en formato revista, vio la luz en septiembre de 2023 en motivo de las fiestas del municipio del Penedès.

La intención de estos fotomontajes era mostrar aquellos cambios y transformaciones que ha vivido el pueblo a lo largo de los años, haciendo una comparación entre pasado, presente y futuro.

Poder recorrer cada calle con una mirada nostálgica, pero a la vez curiosa, haciendo uso de la imaginación para recrear cada escenario y soñando cómo será cada lugar en el futuro, fue una tarea muy emotiva.

Fotografía de retrato y de producto

Fotografía de arquitectura y paisaje

Fotografía analógica

Creación y edición de vídeos